Uso de materiales impresos en el aula
La lectura y la escritura, como prácticas sociales del lenguaje, promueven que los impresos de trabajo en el aula sean diversos. Aunque los libros de texto son un auxiliar docente importante, es necesario ampliar la disponibilidad de otros materiales que enriquezcan la perspectiva cultural de los alumnos. Con el fin de lograrlo, la Secretaría de Educación Pública ha puesto a disposición de alumnos y docentes de todos los grados de Educación Básica la Biblioteca de Aula y la Biblioteca Escolar; ambos acervos contienen materiales esenciales para incorporar a los alumnos a la cultura escrita.
Incluyen textos de divulgación científica, enciclopedias y diccionarios que favorecen el desarrollo de las prácticas sociales del lenguaje en el ámbito de estudio; asimismo, reúnen obras de distintos géneros literarios, épocas y autores, así como antologías, lo que contribuye al trabajo en el ámbito de la literatura y al desarrollo de las actividades permanentes. También cuentan con revistas y libros acerca de temáticas sociales y datos estadísticos de carácter demográfico, útiles en el desarrollo de las prácticas vinculadas con el ámbito de Participación social.
Es importante considerar –si hay disponibilidad y acceso– el uso de computadoras y la Internet, presentes en algunas escuelas. Los docentes deben obtener el máximo beneficio de estos instrumentos e incorporar a los alumnos en nuevas prácticas del lenguaje; por ejemplo: utilizar programas de cómputo para escribir y editar textos, leer en la pantalla de la computadora, buscar información en acervos electrónicos, y enviar y recibir correos electrónicos.